ERYFOTONA AK-NMSC FLUID SPF100 ; 50ML
- Envío gratuito a partir de 30€
- 5 en stock
- Pedido pendiente, envío pronto
Previene y repara el daño actínico.
Da a tu piel una nueva oportunidad.
Prevención y tratamiento protector adyuvante de la queratosis actínica (AK) y otras formas de cáncer cutáneo no melanoma (NMSC).
Reduce y mejora el campo de cancerización cutáneo subclínico que se asocia a queratosis actínica y cáncer de piel no melanoma.
Beneficios
Previene y favorece la reparación del daño actínico causado por el sol.
Crea un film protector de Repairsomes sobre la piel que ayuda a prevenir frente a nuevas lesiones.
Adicionalmente, su uso continuado favorece el mecanismo de reparación natural del ADN.
Modo de uso
Aplicar generosamente sobre toda la zona afectada y otras zonas de riesgo por exposición solar crónica (rostros, frente, orejas, escote, calva, y dorso de las manos) dos veces al día, por la mañana y al mediodía.
Mucho más que un protector
Reduce y mejora el campo de cancerización cutáneo subclínico asociado a la Queratosis Actínica (AK) y al Cáncer de Piel no Melanoma (NMSC).
Textura Fusion Fluid
Exclusiva fórmula tixotrópica que, a través del calor y la fricción en la aplicación, se vuelve más fluida y se funde con tu piel. Notarás su rápida absorción y una increíble sensación de ligereza. Para todo tipo de piel.
Repara el ADN
El sol incide en las células y causa un daño al ADN. Las personas sanas sólo somos capaces de reparar un 45% de este daño de forma natural.
Eryfotona, contiene ADN Repairsomes, fotoliasa encapsulada en liposomas, que reparan otro 45% del daño solar que tu cuerpo no es capaz de reparar y dobla así la capacidad reparadora de tu piel.
Reduce a la mitad la reaparición de lesiones
Crea un film protector sobre la piel (UVB 109, UVA 39) que previene frente a nuevas lesiones. Por ejemplo, en aquellas personas que han recibido tratamiento por una queratosis actínica (AK).
Eryfotona ha demostrado que, a los seis meses, reduce a la mitad la probabilidades de recaída.
La exposición al sol causa un daño al ADN celular que se va acumulando a lo largo de los años y acaba transformándose en daño actínico. Se puede manifestar de forma leve, en arruga y manchas; o severa, en manchas con relieve, picor y descamación, llamadas queratosis actínicas (AK) o cáncer de piel no melanoma (NMSC).
Se estima que, por cada queratosis actínica visible, existen en la zona cercana hasta 10 lesiones subclínicas, todavía no visibles, formando lo que se conoce como campo de cancerización.
La piel tiene una apariencia normal, pero el sol ha producido cambios internamente en ella que, con mucha probabilidad, acabarán desarrollando nuevas queratosis actínicas.
Si te han extraído una queratosis actínica es muy importante tratar todo el campo de cancerización subclínico con el objetivo de evitar nuevas lesiones en la zona.
Compras seguras y envíos ágiles, ¡tu salud es nuestra prioridad!