Hace casi 40 años, A-DERMA inventó la dermatología vegetal, una nueva forma de cuidar la piel frágil.
¿Y si las plantas fueran la clave para cuidar la piel frágil, todos los tipos de piel frágil? Estábamos convencidos de ello cuando empezamos, en una época en la que lo natural no estaba en boca de todos. Hoy estamos seguros de ello, gracias a la investigación científica de vanguardia que, año tras año, ofrece una experiencia absolutamente única en materia de plantas. En el corazón de todos nuestros productos hay un activo único, la avena blanca Rhealba®.
Este enfoque dermatológico pionero, basado en las plantas y comprometido con el ser humano y la naturaleza, permite que la piel frágil recupere su equilibrio, de forma natural.